https://www.thedialogue.org/wp-content/uploads/2023/11/LAA231101.pdf

Acá una versión en castellano – La industria y la construcción muestran caídas pronunciadas del 9% (a setiembre) y la agricultura de 4%, mientras la minería ha crecido por la nueva mina Quellaveco haciendo que la recesión peruana medida por el PBI sea ligera (-0,65%). Estos datos señalan claramente que la causa inmediata de la recesión es la fuerte caída de la demanda interna, en especial del consumo privado, debido a que los salarios nominales en el último año no han subido nada mientras la inflación ha sido de 5%. También la inversión privada ha caído por el alza de tasas de interés del banco central y la inestabilidad política generada por un régimen que está socavando la democracia y ha provocado 60 muertos violando derechos humanos. Mientras tanto, la inversión y gasto público han venido cayendo, agravando la recesión, al tiempo que el déficit fiscal ha subido hasta 2,8% del PBI debido a una fuerte caída de los ingresos tributarios causada por nuevas exoneraciones e incentivos a la evasión. Frente a esta recesión, el Congreso ha aprobado un presupuesto adicional pedido por el Ejecutivo de 0,5% del PBI sin medidas para recuperar los ingresos tributarios, aunque la ley actual fija un tope de déficit de 2,4% y no se ha modificado. Retomar el crecimiento requiere una política fiscal y monetaria reactivadora acelerando la inversión pública fuertemente y rebajando las tasas de interés, aprobar una reforma tributaria progresiva y anti-elusión y establecer una política industrial para promover nuevos sectores productivos aprovechando nuestra biodiversidad.